Cambio de colegio: ¿cómo podemos ayudar a los niños tímidos?

 

La vuelta al cole siempre es un momento emocionante. Cargada de ilusión y de expectativas, suele ir acompañada también de algunos miedos que son totalmente normales: ¿Veré a mis amigos y amigas? ¿Con quién estaré en clase? ¿Cómo serán los profes? ¿Echaré de menos a mis padres? Adelantarnos a ese primer día de cole con información y con recordatorios del curso pasado, así como validar todas las emociones que nuestros hijos e hijas sientan los días previos serán fundamentales para darles confianza. En el caso de un cambio de colegio esa incertidumbre suele ser mayor, por lo que es aún más importante acompañarles de la mejor forma posible. Pero, ¿qué ocurre cuando nuestro peque es tímido? Pues de eso vamos a hablaros en el siguiente post. ¿Nos acompañas? ¡Allá vamos!

Los cambios para los niños tímidos

En general, podríamos decir que los niños tímidos, sobre todo a determinadas edades, se enfrentan a un cambio de colegio con un temor mayor que aquellos niños que son más abiertos y seguros porque aquí entra en juego la relación social. Los niños tímidos son niños que normalmente se sienten inseguros cuando mantienen relaciones sociales, y si ahora, con el cambio de colegio, esas relaciones deben darse con desconocidos les puede resultar más difícil. Además, en estos casos de gran incertidumbre (no conocer con quien estarán, si se llevarán bien o no con compañeros, cómo serán los profesores, cuáles serán. Las nuevas normas en clase), suelen anticipar de forma negativa las cosas que pueden ocurrir. Esto les genera miedo y puede aumentar la inseguridad ante la situación.

Lo primero que debemos hacer las familias es bajar las expectativas y objetivos. Sabemos que no es fácil pero si queremos que nuestro hijo esté feliz, incluso que se ilusione con la noticia del cambio, debemos mostrarle las oportunidades que se le presentan sin agobiarles. Muchas veces tenemos tantas ganas de que se sientan bien, y nos preocupamos tanto, que acabamos ahogándoles en unas responsabilidades y unas expectativas que no les corresponden. Debemos ser conscientes de que en un principio la noticia de un cambio de colegio no tiene por qué gustar a un niño tímido. De hecho, como os hemos avanzado, lo más probable es que la noticia le provoque incertidumbre y miedo. Lo primero que podemos hacer es acompañarle, abrazarle y decirle que sabemos que es difícil. Que sienta que estamos ahí.

Optimismo, comunicación y confianza

Es fundamental que los padres podamos transmitirles la situación con optimismo. En Crece BIen vemos a algunas familias con más miedo que los propios hijos. Es cierto que los niños y niñas se adaptan mejor de lo que pensamos a los cambios, están más preparados que los adultos para ello. De hecho, el cambio puede ser una experiencia que suponga un aprendizaje y haga más fácil otros cambios futuros. ¿Qué puede ocurrir si el cambio que hemos hecho no sale bien? Que siempre podremos volver a hacer otro cambio, ¿no es así?

La comunicación también es fundamental. Hablar con ellos de los cambios y de lo positivo que es probar cosas nuevas que no conocíamos es muy importante ya que juntos podremos ver que los cambios pueden ser también positivos, que no son todo cosas negativas. Y que los cambios son parte de la vida. Por supuesto, debemos acompañarlo en cómo se está sintiendo. Basta con hablar de lo que sienten si desean expresarlo y validarlo. Si no lo pueden expresarlo por falta de práctica o porque sus emociones están muy bloqueadas, podría ayudarle que le leamos algún libro o una película en la que el personaje haga un cambio de colegio o de casa.

Por último, es también muy interesante reforzar la confianza en las decisiones que toma la familia. Juntos podéis poner en común qué decisiones buenas habéis tomado como familia, cuáles no han sido tan buenas y qué habéis aprendido de unas y de otras.

Recomendaciones para prepararles para un cambio de colegio

  1. Ayudarle a poner en una lista lo que le da miedo y así buscar soluciones juntos. Podemos preguntar a algún familiar si tuvo que cambiar de colegio y cómo lo llevó, qué le pasó, y así convertirnos en buscadores de experiencias de cambio. Le ayudará a normalizarlo y verlo como parte de la vida.
  2. Proponerle ir a visitar el colegio. Conocer el espacio le hará sentirse más seguro. Incluso si puede conocer a alguna persona del colegio a la que pedir ayudar si lo necesita.
  3. Al comunicárselo, lo ideal es mostrar el mensaje lo más claro y sencillo posible, y dejar que el niño o niña sea quien comparta qué siente, qué piensa, cómo lo ve. Si prefiere no hablar, debemos respetarle y darle espacio y retomar el tema más adelante, sin presión.
  4. Si el niño está triste, ofrecerle un abrazo, un paseo y comunicarle que estarán cerca sus padres para lo que necesite.
  5. En el tiempo en el que se dará el cambio de colegio, que el tema del cambio no acapare el 100% de las conversaciones. De esta manera verá que es algo más y será de ayuda para no darle más peso del que tiene.

 

Os contamos un juego que hacemos en Crece Bien y que sirve muy bien para hablar con ellos y ellas porque es muy visual:

En una cuerda se ponen diferentes pinzas. En un extremo la palabra negativo y en el otro extremo la palabra positivo. Entre los dos extremos tienen que ir escribiendo aspectos que ven más o menos positivos y más o menos negativos. De esta manera podrán ver que nada es tan bueno o tan malo.

 

 

¿Cuándo debemos buscar ayuda para afrontarlo?

Normalmente situaciones como esta de un cambio de colegio suelen resolverse sin mayores dificultades. Pese a que los niños tímidos pueden contar con una predisposición mayor a rechazar la incertidumbre del cambio, lo cierto es que con un acompañamiento adecuado de la familia y del entorno escolar no tienen mayores problemas.

Sí os recomendamos buscar ayuda profesional en algunas ocasiones:

  • Si la situación de tristeza, enfado, apatía o miedo se mantiene en el tiempo más de tres meses o su intensidad dificulta en gran medida el día a día.
  • También cuando si su estado de humor cambia constantemente, pierde el apetito o sueño y esto se mantiene durante el primer trimestre.
  • Por último, también sería adecuado pensar en acudir a un profesional cuando a pesar de haber pasado tiempo en el nuevo colegio, sigue pensando en el anterior, rechaza hacer amigos o hacer las tareas escolares. Un pequeño apoyo de una persona externa a la familia, que le ayude a afrontarlo con recursos, puede hacer que sea el camino más sencillo.

 


 

 

En Crece Bien somos profesionales con amplia experiencia en inteligencia emocional. Si tienes alguna duda o necesitas alguna recomendación, te animamos a que contactes con nosotros, estaremos encantados de atenderte. Puedes hacerlo en el correo electrónico informacion@crecebien.es o en el teléfono 910002602.